Dos niños y su madre murieron, y el padre quedó luchando por su vida, después de comer comida callejera en un popular sitio turístico de Estambul, informaron el viernes funcionarios y medios de comunicación turcos.
Según los informes, la familia enfermó el miércoles después de comer varios platos populares de comida callejera en un restaurante del barrio costero de Ortakoy, al pie de un puente que cruza el Bósforo.
La familia, que se alojaba en el distrito de Fatih, enfermó poco después y fue trasladada de urgencia al hospital, pero los dos niños, de 6 y 3 años, fallecieron, según informó el jueves en X el jefe regional de salud de Estambul, Abdullah Emre Guner.
Según informó, los padres estaban siendo tratados en cuidados intensivos y se había abierto una investigación.
La madre falleció poco después, escribió el ministro de Justicia, Yilmaz Tunc, en X el viernes.
“Se han tomado muestras de los lugares donde se sabe que la familia ha comido y cuatro personas… han sido detenidas”, escribió el ministro.
Guner dijo que la dirección provincial de salud ha iniciado una investigación.
Algunos medios de comunicación informaron que la familia había comido mejillones con arroz, un aperitivo popular que suelen vender los vendedores ambulantes, así como «kumpir» —patatas rellenas al horno—.
Otros informes indicaban que habían comido kokorec, un plato popular de entrañas de cordero a la parrilla, y también mencionaban las delicias turcas, afirmando que la familia era una familia turca que vivía en Alemania y que había venido a Estambul de vacaciones.
El incidente en Turquía se produce unos cinco meses después de que dos carnicerías en el norte de Francia cerraran temporalmente tras la muerte de una niña por una grave intoxicación alimentaria.
Las enfermedades transmitidas por los alimentos causan la muerte de más de 900 estadounidenses al año y enferman a decenas de millones anualmente, según un informe publicado a principios de este año por investigadores federales. Se desconoce el número real de personas que enferman por consumir alimentos contaminados, y es probable que sea mucho mayor que las cifras oficiales, ya que solo un pequeño porcentaje de las enfermedades relacionadas con alimentos contaminados se diagnostican y se notifican a las autoridades de salud pública.
El año pasado en Estados Unidos, un brote de listeria relacionado con la carne de charcutería Boar’s Head retirada del mercado provocó la muerte de al menos 10 personas y enfermó a decenas más.