Siete guardaespaldas fueron arrestados por su presunta participación en el asesinato de un popular alcalde mexicano, dijeron las autoridades.
Carlos Manzo, alcalde de Uruapan y crítico abierto de la violencia de los cárteles, fue asesinado a tiros el 1 de noviembre en un evento público conmemorando el Día de Muertos.
La Fiscalía General de Justicia del estado de Michoacán informó en un breve comunicado que los servidores públicos fueron detenidos «por su probable participación en el delito de homicidio agravado, en comisión por omisión» en relación con el asesinato de Manzo.
Esto sigue al arresto el miércoles de un hombre que la policía describió como el cerebro detrás del asesinato, quien según las autoridades tenía vínculos con un poderoso cártel.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán, al oeste de la capital, Ciudad de México, dijo que los siete guardias fueron arrestados por funcionarios estatales y federales, incluida la Guardia Nacional.
El viernes, tropas y agentes sacaron a los sospechosos de un edificio municipal cerca de donde Manzo había sido asesinado, según Associated Press.
El alcalde, de 40 años, asistía a una ceremonia del Día de los Muertos —que honra a los familiares y amigos fallecidos— junto a sus parientes cuando recibió siete disparos, lo que provocó que los presentes corrieran a refugiarse.
El asesinato de Manzo desencadenó protestas masivas y surgieron preguntas sobre por qué su equipo de seguridad no logró detener al pistolero solitario.
El sospechoso fue posteriormente detenido y baleado por los guardaespaldas de Manzo.
Manzo había hablado abiertamente sobre cómo los productores de aguacate de la región estaban siendo extorsionados y amenazados por grupos criminales, y también había exigido que el gobierno federal de México hiciera más para controlar a los cárteles.
El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), al que el ministro de Seguridad de México culpó del asesinato de Manzo, se dedica al tráfico de drogas, así como al secuestro para pedir rescate y la extorsión.
También es tristemente célebre por atacar a funcionarios públicos que se niegan a cumplir sus órdenes.
Las autoridades mexicanas arrestaron el miércoles al supuesto autor intelectual del asesinato, identificado sólo por su nombre de pila, Jorge Amando.
Aunque se cree que el CJNG es el grupo criminal más poderoso que opera en Michoacán, existen muchos otros y sus luchas por el control de las rutas de contrabando de drogas, armas y combustible a menudo resultan en enfrentamientos mortales.
