Un restaurante en el centro de Tailandia estaba repleto de clientes que acudían en busca de una experiencia gastronómica única: disfrutar de una comida sentados en aguas de inundación, rodeados de peces vivos que ellos mismos traen al establecimiento.
Desde que un río cercano se desbordó hace 11 días, el restaurante ribereño inundado se ha convertido en una sensación en internet, atrayendo a clientes deseosos de posar en el agua marrón que lame las olas o lanzar comida para peces para fotografiar el frenesí alimenticio.
En el restaurante Pa Jit, en la provincia de Nakhon Pathom, a unos 30 kilómetros (18,6 millas) de Bangkok, las familias disfrutaban de un almuerzo. Los niños pequeños, fascinados, observaban con atención los peces de río que chapoteaban a su alrededor. Los camareros, ataviados con botas de agua, llevaban con cuidado tazones de sopa de pescado o fideos con pollo de mesa en mesa.
Pa Jit ha sido un lugar emblemático a orillas del río durante más de 30 años, comentó su dueña, Pornkamol Prangprempree. Cuando el restaurante se inundó por primera vez hace unos cuatro años, se sintió muy desolada.
“Estaba segura de que no vendría ningún cliente”, dijo. “Pero entonces un cliente publicó en internet que había pescado. Y entonces vino muchísima gente a comer aquí”.
Dijo que las inundaciones han impulsado su negocio, y que sus ganancias se han duplicado, pasando de unos 10.000 baht (309 dólares) a unos 20.000 baht (618 dólares) por día.
Chomphunuth Khantaniti, de 29 años y residente de la misma provincia, se encontraba allí con su esposo y su hijo. Dijo que al enterarse no pudo resistirse.
“Me parece genial, porque podemos traer a los niños. Cuando ven los peces, se ponen más tranquilos”, dijo. “Creo que en Tailandia solo hay un lugar como este donde se pueden ver peces así”.
Bella Windy, de 63 años, vino al restaurante porque quería sentir el pescado mordisqueándole los pies.
“Normalmente, si el agua está muy alta, los peces vienen aquí. La experiencia en contacto con la naturaleza es el principal atractivo de este restaurante y lo que atrae a la gente.”
En Pa Jit se esperan algunas semanas más de inundaciones, ya que las mareas altas y el final de la temporada de monzones mantienen altos los niveles de agua.
Si bien las inundaciones han traído una inesperada bendición a Pa Jit, han devastado muchas otras zonas de Tailandia. Desde finales de julio, doce personas han muerto y dos han desaparecido a causa de las inundaciones, según datos del Departamento de Prevención y Mitigación de Desastres.
El viernes se informó que más de 480.000 personas en 13 provincias, particularmente en el norte y el centro, se vieron afectadas por las inundaciones.