No está claro si el entrenador Enzo Maresca está en la lista de malos del Chelsea este año, pero los Blues podrían beneficiarse de una resolución.
Los reiterados comentarios del italiano sobre «muchas personas» que causaron sus «peores 48 horas» han provocado una serie de críticas veladas hacia la jerarquía durante la última semana.
Sin embargo, Maresca sin duda ha demostrado ser un entrenador consumado desde que se unió al Chelsea procedente del Leicester por £ 10 millones en julio de 2024. Se clasificó para la Liga de Campeones y ganó la Copa Mundial de Clubes y la Conference League en su primera temporada.
En cuanto a su plataforma, Maresca puede tener algunas quejas, pero aún cuenta con un equipo talentoso que incluye a Cole Palmer, Moisés Caicedo y Enzo Fernández, quienes están ganando experiencia y aún no han alcanzado su mejor momento. Jóvenes talentosos, como Estevao Willian y Geovany Quenda, se han incorporado o están a punto de incorporarse.
Los ingredientes del éxito ahora son evidentes en la era BlueCo de Chelsea bajo los propietarios estadounidenses Todd Boehly y Clearlake Capital.
Ese proyecto podría priorizar el colectivo sobre cualquier individuo. Sin embargo, un cambio de entrenador representaría un reinicio y obligaría al club a retroceder un poco antes de volver a avanzar.
Tal vez, para Chelsea, la Navidad misma pueda ser una época de reflexión y resolución.
